Según un reporte reciente, la compañía finlandesa trabaja en un modelo de gama baja con una versión de Android muy modificada, al estilo de Amazon; difícilmente supere la compra por parte de Microsoft, raro no?
La historia es la siguiente: Nokia tiene, según varios reportes, un teléfono funcional con Android, que planea presentar en 2014.
Pero cómo, ¿no es que Microsoft compró la división de celulares de Nokia ? En efecto, y en la última semana las autoridades regulatorias de la Unión Europea y de Estados Unidos aprobaron la compra, luego de que la asamblea de accionistas de Nokia diera el visto bueno.
Pero según publican los sitios Allthingsd y The Verge , el smartphone -cuyo nombre en código es Normandy- está bastante avanzado (incluso circula una imagen, cortesía de Evleaks , que tiene muy buena reputación para estas cosas). Los plazos para desarrollar un celular son largos, así que el trabajo empezó, seguramente, antes del anuncio de la oferta de Microsoft (y, según algunos analistas , fue una herramienta para lograr que Microsoft también comprara los celulares no inteligentes).
Este smartphone sería de gama baja, económico, y apunta a llevar el mundo Asha un poco más allá de un camino que parece terminarse. Usa Android, sí, pero muy modificado, al estilo de lo que hizo Amazon con sus Kindle, es decir, usa la base de código abierto pero cambia la interfaz de usuario, etcétera, de tal manera que mantiene cierta compatibilidad con las aplicaciones de Android pero no se parece a él (y no está claro qué tan compatible es). Para muestra, un botón: el del frente del teléfono, similar al de los últimos Asha pero que no tiene los botones clásicos de Android.
Nokia no es ajena a Linux: una versión de este sistema operativo iba a ser su base para el futuro después de Symbian (que quedó trunco con el N9) y, una vez que hizo el cambio a Windows Phone, se especuló por mucho tiempo con que la plataforma Meltemi -basada en Linux- sería el corazón de sus equipos de gama baja.
Todo esto, por supuesto, es anecdótico: lo cierto es que en algún momento del próximo trimestre la división de celulares de Nokia pasará a ser parte de Microsoft.
¿Existe, entonces, un futuro para Normandy? Si está efectivamente tan avanzado como dicen los rumores, es muy probable que los finlandeses se apuren a presentarlo antes de que la compra sea efectiva. Qué sucederá luego es una incógnita, pero es difícil imaginar un escenario en donde Microsoft decida desviar recursos para apoyar un sistema operativo para móviles cuando ya tiene uno propio. Falta ver, además, qué tan compatible es con el resto del mundo Android, cómo gestionará la tienda de aplicaciones y demás.
De hecho, Microsoft está analizando reducir las versiones de Windows 8 (que hoy son tres, si se cuenta la estándar, la de Windows 8 RT y Windows Phone 8, que comparten el mismo núcleo) a dos, o regalar RT y Phone 8, según The Verge ; difícilmente quiera sumar una tercera.
El otro problema es que si está pensado para la gama baja y optimizado para correr en hardware modesto, tendrá que competir con Windows Phone 8, que ya es bueno en ese segmento. Claro, los Asha suelen tener hardware mucho más modesto que el Lumia 520, pero no que el Lumia 510 (256 MB de RAM, chip a 800 MHz) que corría Windows Phone 7.8. Antes que darle cabida a otra plataforma, es probable que Microsoft haga todo lo posible por reducir los requerimientos de hardware de Windows Phone 8.
Pero todo esto es, me temo, especulación; por ahora no hay nada oficial.
Redactado.-Gerardo
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